En este artículo están (un poco arbitrariamente) lo que, al momento, creemos que son nuestros 5 mejores consejos para iniciar en el mundo swinger. ¿Se les ocurren otros?
- Ideas para principiantes
- Mundo SW
- Primeros pasos en la vida swinger
- ¿Qué debemos saber antes de iniciar en el swinging?
5 Consejos para iniciar en el mundo swinger
Aunque Mariana no de consejos, y aunque hayamos ocupado varios años en escribir aquí y en otros foros algunas de nuestras experiencias en el mundo swinger con la idea de que otros viajeros que transiten este camino encuentren una ruta más fácil que la nuestra, no deja de ser importante, de vez en cuando, hacer resúmenes, croquis sencillos que la gente pueda consultar sin tener que navegar entre más de 500 artículos sobre la vida liberal.
Nuestras sugerencias para swingers principiantes
Con esa idea, hemos publicado algunos post tipo “10 pasos para tu primera experiencia swinger” o el “acordeón para los swingers novatos”. Hoy decidí aprovechar una de las preguntas nos hizo el equipo de producción de un programa de radio antes de la entrevista, para hacer una de estas guías de referencia rápida para la vida SW, entendiendo, claro lo que siempre repetimos: En esta misión de explorar fantasías sexuales, no existen tallas únicas ni recetas estandarizadas. Pero algunas personas querrán saber cuáles son nuestros mejores 5 consejos para adentrarse en el mundo swinger. Y aquí hay algo que podemos decir al respecto:
Nuestros mejores 5 consejos para el estilo de vida swinger.
1.- Vayan siempre a la velocidad de quien va más lento.
Imaginen subiendo una montaña. Es un reto personal, pero también un trabajo en equipo. Ambos van unidos con una cuerda y ésta sirve para protegerlos y mantenerlos cerca. Los dos juntos siempre estarán mejor que cada uno por su lado. Así es en la vida matrimonial y también en este deporte del swinging. Es de lo más común que al iniciarse en la práctica swinger, uno de los dos tiene más información en la cabeza, y por lo tanto, más fantasías y mayores expectativas. Cuando se paran por primera vez en un club, quien espera más se vuelve eufórico y quiere acabarse todo en una noche. La otra persona, apenas está metiendo los dedos de los pies al agua y mientras mira a su persona amada alejarse entre las olas, se siente, irremediablemente sola y asustada. A nadie ayuda eso.
Será mucho mejor la paciencia porque así el mensaje que se envía al otro es claro: tu felicidad es lo más importante para mí, y nada de lo que ocurra hoy, por fantástico y atractivo que parezca, me va a desviar de mi objetivo principal: que tú estés bien. Así es como se establecen las bases de una complicidad que durará mientras quieran seguir aventurándose en el lifestyle. Además, esa complicidad es, en realidad, el verdadero premio en esta práctica sexual.
2.- Compartan lo que desean y lo que temen con toda claridad.
¿Se acuerdan de esta eterna discusión entre las parejas? “Es que yo pensé que tú creías y luego como vi, pues me confié…” Sucede hasta en los mejores matrimonios, pero precisamente, como al iniciar en el mundo sw las emociones están muy a flor de piel, el riesgo es mayor. Después de todo, aquí no estamos discutiendo quién fue el culpable de que las llaves se quedaran dentro de la casa, sino con sentimientos más delicados. Por eso, la claridad entre ustedes es fundamental.
La manera en la que experimentamos y sentimos las actividades swinger son muy distintas para cada persona, incluso entre personas que se conocen muy bien y que comparten una vida. Asumir nunca es buena idea y preguntar nunca está demás. En este deporte, como en la primaria, no hay preguntas tontas y aunque parezca obvio decirlo: nadie sabe leer la mente. Más allá de eso, comunicar con todas sus letras lo que deseo y lo que temo permite a la otra persona tener toda la información que requiere para cuidarme y hacerme feliz en la medida de sus capacidades. Así como le llevamos al médico unos estudios detallados que dicen todo sobre el interior de nuestro cuerpo, porque sabemos que esos datos son claves para que el docto señor pueda hacer su trabajo. Facilitemos el trabajo de nuestro cómplice de aventuras diciéndole todo lo que necesita saber para que seamos felices.
Recuerden que nunca han estado en una situación como la que enfrentarán, entonces, el otro no tiene ningún tipo de experiencia en la materia o conocimiento previo sobre mis emociones.
3.- Constantemente comuníquense, de una u otra forma, que uno es la prioridad del otro y viceversa.
Las primeras experiencias swinger son muy emocionantes y puede ocurrir que olvidemos que venimos en pareja. Cuando esto ocurre, lo peor que nos puede suceder es que la persona a la que más amamos en el mundo sienta que perdió protagonismo en nuestra fantasía. Por eso, hay mil formas de recordar constantemente que estamos juntos en esto y que nuestra relación de pareja es la prioridad. Puede ser simplemente contacto visual con una sonrisa cómplice, buscar tocarse el uno al otro, decirse que se quieren, agradecer la experiencia o preguntar alguna vez si todo está bien. El punto es, sobre todo, mientras el territorio swinger no les sea muy familiar, hagan señales frecuentes para darse confianza el uno al otro y poder seguir explorando con paso firme.
4.- No presionen a nadie (ni siquiera a su propia pareja) y no se dejen presionar por nadie (aunque esto no sea tan común)
Frente a la novedad, todos somos estúpidos. Y entre las estupideces que podemos hacer en el mundo swinger es embriagarnos con la posibilidad de cumplir nuestros deseos y hacer a un lado las prioridades. ¿Recuerdan que dijimos que hay que ir a la velocidad del que va más lento? Bueno, pues tampoco se vale presionar a esa persona para que acelere el paso. Pero también ocurre que, a veces, el hambre hace que se nos olviden los modales. Y bueno, es recomendable siempre hacer propuestas, pedir las cosas, expresar nuestros deseos, sí. Pero todo eso, sin insistir ni hacer sentir incómodos al resto de los participantes.
Todo esto también aplica a la inversa. No es común, sobre todo porque los swingers experimentados conocen la importancia de dar a cada quien su espacio y tiempo, y rara vez nos topamos con personas que insisten más allá de lo que es cómodo. Pero puede ocurrir. Si esto pasa, no teman ser asertivos y claros. Ya sea que quienes los hacen sentir presionados son sus potenciales compañeros de juego, alguien a quien no quieren cerca, o su propia pareja que no leyó el párrafo anterior, es perfectamente correcto decir: “Yo voy un poco más despacio y aún no me animo”, “Esto no es lo mío”, “Todavía no estamos listos para ello”, “No quiero”, “La verdad es que en este momento nos estamos sintiendo presionados” o la siempre mágica. “No es no”.
Si, después de eso, la situación continúa, aléjense de ahí o, en casos muy raros y extremos, pidan ayuda. Los swingers que los rodean están siempre dispuestos a alejar un potencial peligro.
5.- No traigan a la vida swinger la basura del el mundo exterior.
El mundo sw es un universo muy feliz al que la gente viene a pasarla bien. No traigan para acá la cosas que están mal en el mundo exterior. Eso incluye, conductas aprendidas que tal vez son útiles en las sociedades vainilla, pero es como llevar plástico a la jungla; ninguna de las criaturas que aquí habitamos, lo agradece y al final lo que se queda aquí tarda varios años es biodegradarse.
Dejen prejuicios afuera, aquí todo el mundo se puede vestir como le de la gana independientemente de su tipo de cuerpo y de las recomendaciones de estilo de Discovery Home and Health. Dejen de pedir mesa VIP o Paquete Reina de la Primavera, si alguien les vende el aislamiento como un valor agregado, lo único que está haciendo es quitarles su dinero y la posibilidad de convivir con gente a la que, de otro modo, no conocerían. Si quieren rodearse solamente del mismo tipo de personas que los rodean en su vida diaria, quédense ahí. En el mundo sw todos tenemos algo que aportar, y eso no quiere decir que todos nos gustamos o tenemos sexo con todos.
Si, su autoestima necesita trabajo, seguramente en el ambiente swinger encontrarán un escenario ideal para desarrollarla. Pero dejen que la magia ocurra por si sola. Lo prometo, ocurrirá. No es necesario que la fuercen imponiendo a otros sus complejos, necesidad de tenerla más grande, o de traer el chisme más caliente. Seguramente, ustedes también vinieron aquí huyendo de todo eso, así que disfruten de las delicias de este ecosistema.
Sin duda, estos no son los únicos consejos para iniciar en el mundo swinger, sólo son los que hoy, y desde nuestra experiencia, nos parece importante compartir. Pero los lectores de Jardín de adultos que llevan más tiempo de viaje, seguramente tendrán otros que dejar en los comentarios. ¿Verdad que sí?
Sin duda de gran ayuda y muy interesante. Nos da la oportunidad de conocer con más claridad su mágico mundo.
Hola, sus comentarios van cargados de total sensatez, sentido común y elegantemente descritos, magnifica reseña, de quienes entran a un tobogán de emociones y sensaciones complicadas de expresar. Estupendas recomendaciones.
Me parece una forma de vida para las parejas, liberadora, fascinante pero en nuestra cultura llena de retos que me gustaría experimentar.