Amantina: Un secreto en el lago

Pocas cosas me emocionan más que ver nacer proyectos interesantes para la comunidad liberal. Por eso, no podía esperar para venir a contar el chisme de lo que, dentro de poco, aparecerá en el horizonte turístico mexicano. 

     Una copa de vino espumoso los acompaña mientras cruzan el lago en pontón. Al llegar, atraviesan el muelle y, en lo que se registran y cubren formalidades, el personal les acerca un trago de su bebida favorita. Su habitación los espera, cálida, lujosa  y confortable.  Con una inmejorable vista, Amantina es una propiedad discreta reservada para parejas de mente abierta. La construcción encarna con sutileza el juego entre ver y no ser visto. Los huéspedes podrán asolearse desnudos sin temer a las miradas inquisitivas del exterior  al tiempo que contemplan los botes cruzar. Contará con un jacuzzi para veinte personas y una extensa área de juegos. 

     El diseño resuelve el frío del bosque combinando espacios interiores, chimeneas y calefactores con enormes ventanales que permitirán mantener contacto visual constante con la naturaleza que rodea al hotel que iniciará su oferta con pocas y exclusivas habitaciones. ¿Qué promete? Alimentos y bebidas incluidas en el precio del hospedaje las veinticuatro horas, también kayaks para aprovechar el lago y la posibilidad de contratar otras varias actividades como esquí y parapente. El hotel no escatimó en detalles y sus anfitriones se están esforzando mucho en garantizar estancias placenteras a parejas exigentes.

     La inauguración está prevista para mediados de marzo, y aunque el número de habitaciones estará muy limitado, los asistentes podrán hospedarse en Valle de Bravo y asistir a una fiesta de doce horas en las que no faltará absolutamente nada. De esa manera, Amantina abrirá sus puertas para que todos los swingers puedan ir a conocerlo.

     Todo esto nos pone de muy buen humor. Primero, porque es una muestra clara de que la cultura swinger en este país crece, se afianza y se diversifica. Segundo porque a mayor oferta en este nicho, más son las razones para que visitantes extranjeros miren a México como un centro de actividades,  un destino turístico atractivo y una autoridad en términos de pensamiento sexualmente positivo. Y tercero, porque a los dueños los conocemos personalmente y, como son maravillosas personas, esperamos que les vaya maravillosamente bien.