Si pensabas que la costumbre de hacer manuales eróticos ilustrados era exclusiva de India, pues resulta que no es para tanto. Sepan cuantos leyeren que en la Italia del XVI un individuo llamado Giulio Romano hizo algunos dibujos pornográficos que ilustraban posiciones sexuales, que luego regaló a Marcantonio Raimondi. Basado en ellos, Raimondi hizo unos grabados compilados bajo el nombre de I modi, que produjeron la ira del Vaticano y le costaron el encarcelamiento. Al salir de prisión, mostró los dibujos originales al poeta Aretino quien, inspirado compuso dieciseis sonetos para acompañar las posturas.
Se editó nuevamente en 1527 I modi, esta vez acopañando los gravados con los poemas de Aretino, pero a pesar de (o mejor dicho, debido a) su popularidad, esta publicación fue nuevamente censurada por el Vaticano. De los trabajos originales queda casi nada, pero su influencia fue tan grande que hay múltiples versiones de I modi realizadas hasta por toda Europa hasta el siglo XIX.
Con información de Eroti Cart