Las fiestas temáticas del Pistache, Hotel Boutique

El Pistache es uno de esos lugares de los que es sencillo enamorarse. Desde hace siete años se ha esforzado por brindar a sus huéspedes un espacio sensual en el que parejas inquietas puedan relajarse, disfrutarse y extender los límites de su libertad rodeados de más personas de mente abierta. No es ningún secreto que Mariana y para mí, este discreto destino morelense se ha convertido en uno de nuestros sitios más queridos. Todo en él nos gusta: el clima, la atmósfera sin estruendo de antro, el servicio de hotelería, la comida, los detalles, los jardines, la compañía grata de sus anfitriones y las horas de conversación previas y posteriores al juego con gente siempre interesante. Nos casamos ahí. Ahí hemos conocido a muchos de nuestros amigos más cercanos. Y de ahí regresamos siempre con un guapo bronceado libre de líneas.

     Por eso nos da gusto cuando, al Pistache le pasan cosas padres. Por ejemplo, ahora cuentan con una gerente guión promotora guión anfitriona guión mujer de muchos talentos que se esmera en darle un empujón para acercarlo más a las preferencias de clientes potenciales. Sin ánimo de convertir éste paraíso en tierra de spring breakers swingers, ahora apuesta por aprovechar el ánimo lúdico e histriónico de los liberales y organiza cada quince días una fiesta temática. Disfrazarse siempre será una buena excusa para dejar volar la fantasía, y en un entorno nada multitudinario, puede servir de pie para muchas historias sexis.

     Anexamos el calendario de los próximos eventos. ¿Es indispensable el código de vestuario? Seguramente no, pero es más divertido . Nosotros, por ejemplo, hemos descubierto que el tiempo de planeación para una fiesta temática es tan seductor como la fiesta misma. El cuidado que ponemos en acicalarnos, cuando lo hacemos, se ve bien recompensado con cumplidos que sirven para iniciar conversaciones y éstas nos ayudan a conocer a otras parejas. ¿No es eso lo que todos queremos?